La Hora de la Misericordia

 

Cristo pidió a Sor Faustina para honrar el momento de la muerte del Redentor.

“Te recuerdo, hija Mía, que tan a menudo cuando oigas el reloj dando las tres, sumérgete totalmente en Mi misericordia, la adorando y glorificando; invoca su omnipotencia para el mundo entero y especialmente para los pobres pecadores; porque en ese momento Mi misericordia se abrió de par en par para cada alma. En esta hora puedes obtener todo por ti mismo y por los demás —- la misericordia triunfó sobre la justicia.

Mi hija, haz todo lo posible para Me acompañar en El Vía Crucis en esta hora, siempre que tus deberes lo permiten; y si no puedes Me acompañar en El Vía Crucis, por lo menos entra en la capilla por un momento y Me adore, en el Santísimo Sacramento, porque Mi Corazón está lleno de misericordia; y si no puedes entrar en la capilla, sumerja allí en oración allí donde te encuentres por un breve momento. Yo reclamo veneración por Mi misericordia a cada criatura, pero sobre todo de ti, ya que fue a ti que Yo he dado la más profunda comprensión de este misterio.”  (Diario 1572)

Cristo se presentó a Sor Faustina varias opciones para adorar su Pasión y Muerte en la Cruz, incluyendo El Vía Sacris, la opción suprema. Debes emular las mujeres de la Galilea que acompañaron a Jesús al Calvario.

“Estaban allí muchas mujeres mirando de lejos, las cuales habían seguido a Jesús desde Galilea, sirviéndole.” (Mateo 27:55)

Si su tiempo es escaso, ora a Jesús: Señor, adoro y glorifico a Vuestra Misericordia en la Pasión y Muerte por nuestros pecados.

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2 Responses to La Hora de la Misericordia

  1. Gracias por compartir esto. Muy lindo.

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