HORTA, FAIAL
Mi amiga Leopoldina Pereira fue mi vecina en Carreira, Castelo Branco, Faial, las Azores. Ella es una santa desconocida que invoco a menudo su protección.
Yo fui a propósito a las Azores para visitar Leopoldina en el 31 de Diciembre del 1987, porque ella quería verme antes de morir. Mantuvimos correspondencia asidua hasta que ella se trasladó a un centro de retirarse en la ciudad de Horta, Faial.
La santa tuvo una vida de Sufrimiento. Humilde, pobre, enferma y solitaria, la anciana participaba diariamente en la Eucaristía y escuchaba en silencio al Consolador. Él comunica frequentemente con los Cristianos, pero no prestan mucha atención debido el ruido del mundo. Mi querida amiga sobresalió en todas las Virtudes Celestiales, y la Humildad fue el apogeo para su projimo.
Yo implore Santa Leopoldina para proteger los AZORIANOS para que puedan escuchar al Espíritu de Dios para preparar remotamente La Segunda Venida de Cristo al Mundo en El Fin de los Tiempos.